Ecología del Terror. 4º LOS ALIMENTOS - AUTOR: PATRONIO

En esta cuarta entrega nos adentramos en la parte más cruel, más deleznable y más injusta del terrorismo ecológico: los alimentos.

Muchos tendrán la impresión de que hablaremos de los países más pobres y del hambre en el mundo. Si, lo haremos, pero ésta entrega no tratará sólo sobre la injusticia del sistema que permite, más bien obliga, que existan hambrunas. El negocio de los alimentos va mucho más allá. Si aún estáis dispuestos a seguirme por lo más sucio y cruel del neoliberalismo, sed bienvenidos y dejad un poco de la felicidad que traéis con vosotros. Ésto es la Ecologia del Terrorismo en su estado más ruín y despiadado: Los alimentos.

Para muchos de vosotros es un problema que sólo afecta a los países más pobres. Descubiréis, si tenéis a bien seguirme, que el comercio del hambre no es exclusivo de las naciones sin recursos. El hambre puede llamar a tu puerta también.

En el mundo, más de 1000 millones de personas pasan hambre, de los que 40 millones viven en Europa y algo más de millón y medio en España. Se podría llenar un país entero con los hambrientos de Europa.

Los datos oficiales indican que aproximadamente un 20% de la población española, es decir 8,5 millones de personas, viven con ingresos inferiores al 50% de la renta media disponible, de las que entre un 1.500.000 y 1.700.000 estarían en situación de extrema necesidad.

Vemos, pues, que en la Europa del siglo XXI aún se pasa hambre. Gente revolviendo en los contenedores e ingiriendo la comida que a otros les sobra ya es una imagen común en las ciudades del "primer" mundo.

En EE.UU. la cifra se dispara. Una nación, que pretende ser ejemplo para el mundo, nos demuestra lo más sórdido del capitalismo. Según el último estudio del U.S. Department of Agriculture un 16% de familias pasan hambre. Esto se cifra en un monto de 49 millones de personas, incluyendo más de 16 millones de niños. Ese es el sueño americano, es la imagen que no queren que sea vista:

Y en Europa, fieles seguidores de las políticas económicas de los USA, la cosa va parecida. No, no es exclusivo de "los países en vías de desarrollo"

Seguro que alguno de vosotros, yo al menos si, habéis visto cómo una vez caída la noche alguien revolvía en los contenedores de basura en busca de algún alimento. Con una expresión medio de repugnancia medio de pena, uno pasa a su lado e intenta ayudarle con unas pocas monedas. Comedores sociales abarrotados de gente que no tiene recursos ni para alimentarse. Este panorama ya no es propiedad de los países pobres, es de toda la humanidad.

Pero, ¿quién está detras de todo esto?

Según el Movimiento para el Desarrollo Mundial (WDM) los especuladores son los culpables, al adquirir los denominados futuros especulativos, la persona que contrata el futuro sólo busca especular con la evolución de su precio desde la fecha de la contratación hasta el vencimiento del mismo. No existe escasez de alimentos, eso es lo que nos quieren hacer creer. El planeta, se calcula, puede mantener con los actuales métodos de agricultura y ganadería (y no quiero anticipar) a casi el doble de los habitantes de hoy día.

Un ejemplo:

Durante el verano boreal, los especuladores financieros de la Bolsa de Chicago en Estados Unidos compraron contratos a futuro por cerca de 40 millones de toneladas de maíz. Eso es más que el consumo anual de todo Brasil.

Según la FAO, el alza de los precios no se debe a una escasez de alimentos.

En el mismo período, de abril a septiembre, los precios mundiales del trigo aumentaron más del 40%.

En ese sentido, el programa de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés) afirma que hay mucha comida disponible, por lo que la escasez no puede ser la causa de los altos precios.

Nos hallamos ante la cruda realidad. El comercio del hambre nos demuestra otro de los oscuros y crueles rincones del capitalismo. Aquello que ni sale ni saldrá en los mass media, que los gobiernos barren debajo de la alfombra. El esta globalización, que no hemos pedido, la ambición de un puñado de rastreros personajes en los parquets bursátiles provoca el hambre a escala global. Les llaman especuladores, yo les denomino asesinos, y como tales debieran ser tratados...

La ayuda crucial de las transnacionales

El papel de las transnacionales, en especial Monsanto, en el hambre presente en muchos países, y probablemente en la futura a escala global, es manifiesto.

Pero, ¿quién es Monsanto? No me alargaré ahora en la historia de despropósitos del gigante químico y biológico que es Monsanto, pues tenéis un post a propósito para ello, publicado hace unos días por mí. Me voy a centrar en un hecho: pretende el control mundial sobre las semillas.

Monsanto se presenta a sí misma como una empresa visionaria, una fuerza de la historia mundial que trabaja para aportar ciencia de vanguardia y una actitud ambientalmente responsable a la solución de los problemas más urgentes de la humanidad. Pero, ¿qué es en realidad Monsanto? ¿Cuál es su origen? ¿Cómo llegó a ser el segundo productor mundial de agroquímicos y uno de los principales proveedores de semillas en el planeta?. ¿Es Monsanto la compañía "limpia y verde" que proclaman sus anuncios, o los mismos apenas representan una operación de imagen que oculta la naturaleza criminal de la compañía?

Monsanto es la compañía que introdujo al mercado la primera generación de cultivos transgénicos, convirtiéndose en el líder mundial en la promoción de biotecnología en la agricultura. Actualmente, es el mayor vendedor mundial de semillas transgénicas en Latinoamérica, Estados Unidos y Canadá. Sus cultivos representan más del 90 por ciento de todos los cultivos transgénicos del mundo. Los cultivos resistentes a su herbicida "glifosato", como la "soja RR" (Roundup Ready) y el "maíz RR", sólo promueven la agricultura industrial de insumo-dependencia.  Su política se basa en vender las semillas modificadas genéticamente para resistir a su potente herbicida. Estas semillas son patentadas, disponen incluso de una policía genética para denunciar a todo aquel que plante semillas suyas no procedentes de la venta en la misma temporada, esto es, semillas provenientes de la recolección.

El Roundup (Monsanto) es el herbicida más vendido del mundo. Actualmente, los herbicidas de glifosato, tales como el Roundup, representan al menos una sexta parte de las ventas anuales totales de Monsanto, y la mitad de los ingresos por operaciones de la compañía. Este herbicida mata todas las plantas no transgénicas, incluídas las variedas tradicionales. El ser humano lleva milenios transformando mediante cruzamiento semillas para obtener una mejoría substancial respecto a las plantas naturales. Ésto no es malo, es ley de vida y un proceso no agresivo con el medio ambiente ni con el hombre.

Pero las mejoras mediante ingeniería genética resultan peligrosas, tal y como expliqué en el post dedicado a Monsanto. Se ha roto por lo tanto, con los límites naturales de la vida. Estos nuevos organismos, por supuesto, van a producir impactos ambientales que tal vez ni siquiera podamos imaginar.

Adicionalmente, pondrán en riesgo las tecnologías más tradicionales, de las que depende no sóla la sobrevivencia de las comunidades indígenas y campesinas que las han desarrollado, sino de alguna manera, la sobrevivencia de otros sectores de la sociedad, por su contribución en la seguridad alimentaria:

- El 60% de la investigación en ingeniería genética se centran en desarrollar cultivos resistentes a herbicidas. De esta forma, los agricultores tendrán que usar más herbicidas para controlar malezas.

- Otras investigaciones tratan de prolongar el tiempo de maduración del producto, para favorecer a las empresas comercializadoras.

- Otra línea de trabajo es el desarrollar organismos que les permitar depender menos de la materia prima producida en el 3er. Mundo. Por ejemplo:

se ha producido una tecnología que incorpora en plantas una substancia dulce producida por una planta africana llamada Thaumatina, que podría desplazar los cultivos de caña de azúcar e impactar negativamente las economías dependientes de la exportación de este cultivo, especialmente de aquellos campesinos cuyas formas de vida tradicional ha desaparecido cuando se les impuso la siembra de este cultivo

la compañía Calgene ha producido un compuesto alternativo a la manteca de cacao en la colza, que es un cultivo de zonas temperadas. El producto podría desplazar del mercado a miles de campesinos y agricultores del 3er. Mundo, y hacer colapsar la economía de varios países que dependen de las exportaciones del cacao

- Las nuevas variedades que surgirán como producto de la biotecnología reemplazarán variedades tradicionales, acelerando el proceso de erosión genética, amenazando la seguridad alimentaria de la gente que depende de esos cultivos.

Riesgos ambientales

- Las nuevas características puede transformar al cultivo en maleza. Casi todas las malezas se han originado cuando se introduce una planta a un país o a un ambiente distinto del que ha estado adoptada. Es de esperar que si una planta tiene genes totalmente distintos a su naturaleza, puede transformarse fácilmente en maleza, porque ese nuevo gene puede afectar la germinación de la semilla, la tolerancia a sequías, heladas, su competitividad y otros efectos no deseados

- Estas nuevas malezas serán muy difícil de ser controladas, porque tendrán las ventajas que han recibido de los genes introducidos.

- Si un cultivo ha recibido un gen de resistencia al ataque de insectos, podrían afectar a insectos benéficos, como son insectos polinizadores de ésto u otros cultivos. Se podría afectar además a insectos que controlan poblaciones de otros insectos. Por último, el insecto que se desea controlar, podría generar resistencia a la toxina y convertirse en una plaga incontrolable.

- La aparición de nuevas malezas puede tener efectos negativos en otros organismos de la cadena alimenticia.

En el caso de nuevas malezas con resistencia a herbicidas, para controlar estas malezas, se tendrá que recurrir a múltiples herbicidas, lo que significará aumentar la dependencia a insumos agrícolas y mayor degradación del medio ambiente.

- Los cultivos modificados, pueden cruzarse con variedades silvestres que han sido usadas tradicionalmente por los campesinos para mejorar sus cultivos. Estas plantas pueden también transformarse en malezas, muy difíciles de controlar.

- Si estas nuevas variedades invaden vegetación natural, podrían producir ahí cambios profundos e irreversibles, como la extinción de poblaciones pequeñas y seguir generando nuevos organismos transgénicos por el continuo intercambio de polen que ocurre en la naturaleza .

Es muy importante tomar en cuenta este aspecto, sobre todo en países como el Ecuador, que es centro de diversificación de gran parte de los de cultivos con los que se trabaja en ingeniería genética, incluyendo el tomate, la papa, el maíz, el algodón, el tabaco, etc. La introducción de cultivos transgénicos podría hacer desaparecer las variedades silvestres de la que ha dependido la agricultura tradicional.

- Adicionalmente cuando se crea un cultivo trangénico, utilizando virus, hay el riesgo de crear nuevos virus que pueden transformarse en nuevas enfermedades vegetales. Esto puede ocurrir porque los genes de virus cambian más rápidamente que otros genes, y porque los virus pueden ser transferidos rápidamente de un cultivo a otro, e incorporarse en su genoma.

La biotecnología creará dependencia

- La biotecnología ha sido diseñada para la agricultura intensiva, con monocultivos que cubren áreas muy grandes, dirigidas a la exportación

Las semillas modificadas genéticamente vienen acompañadas de patentes, esto provoca que el cultivo caíga en manos de transnacionales, ésto unido a lo que expliqué sobre la tierra, el agua y el aire crea el caldo de cultivo perfecto para que la especulación se cierna sobre el campesinado, especialmente en los países más susceptibles.

Muertos y no sólo de hambre

En la india esta habiendo una ola de suicidios de los campesinos importante, por la implatancion de las semillas transgenicas de monsanto, lo que sumado a la tremenda pobreza que hay en el lugar, la monopolizacion y el capitalismo les agrega su dosis de malaria, que quien sabe a que puede conducir...

El paquete tecnológico de la revolución verde provocó una fuerte salinización de suelos, el agotamiento y sobrexplotación de acuíferos y una intensa contaminación con plaguicidas de todo tipo. Lo más grave es que sembró la semilla de una crisis económica, social y ambiental en la vida de campesinos pobres que cobra más vidas cada año. Un ejemplo es el de Anil Khondwa Shinde, pequeño agricultor del distrito de Vidarba, estado de Maharashtra (en la parte centro occidental de India). Se suicidó ingiriendo un potente insecticida. Tenía 31 años y murió en pocos minutos. La  desproporción entre costos de producción y precio de venta no le permitieron pagar el crédito extendido por los proveedores de insumos.

¿Un caso aislado? Para nada. El Ministerio de Agricultura de India reconoce las siguientes cifras: entre 1993 y 2003 ocurrieron 100 mil suicidios de campesinos. Y entre 2003 y 2006 (octubre) se han presentado unos 16 mil suicidios de campesinos cada año. En total, entre 1993 y 2006 hubo alrededor de 150 mil suicidios de campesinos, ¡30 diarios durante 13 años!

En muchos distritos los prestamistas locales de antaño han sido remplazados por la red de concesionarios y vendedores de insumos de las grandes compañías, y sus métodos de cobranza han sido denunciados con frecuencia. Cuando los suicidios se agudizaron, el gobierno lanzó un programa de "ayuda" que aseguraba el pago de unos 2 mil dólares para los familiares sobrevivientes,pero ese dinero va directo a los bolsillos de los acreedores y, de hecho, se ha convertido en un incentivo perverso para que muchos productores se quiten la vida.

Estáis dispuestos a ver el mismo caso de Shinde se reproduce por doquier, incluso en nuestro hermoso, paradisíaco y ficticio 1er mundo?, ¿Váis a quedaros parados ante las transnacionales y los especuladores? ¿Estaréis dispuestos a ver cómo millones de personas pierden la vida por hambre porque unos pocos negocia con el futuro alimentario?

<strong>Una visión apocalíptica</strong>

Con el objetivo de garantizar la supervivencia de una serie de especies esenciales de amenazas como el cambio climático y las guerras, un "arca de Noé" vegetal que albergará semillas de los principales cultivos fue inaugurada en 2008 en pleno corazón del Círculo Polar Artico, en territorio noruego.

El proyecto de la Bóveda Global de Semillas de Svalbard, impulsado por el gobierno noruego, el Fondo Mundial para la Diversidad de Cultivos (GCDT) y el Banco Genético Nórdico, permitió la creación de un depósito de bancos de duplicados de semillas de cultivos alimentarios que asegura su supervivencia ante catástrofes naturales e, incluso, la acción del hombre mediante la manipulación genética de los cultivos.

¿Verémos en un futuro una tierra yerma, por el agua contaminada y su escasez fomentada desde un puñado de empresas y especuladores? ¿Verémos cómo tendremos que recurrir a ese "arca" que es la búveda de Svalbard por culpa del terrorismo ecológico? Sinceramente, espero que no. Aunque quién sabe...

<strong>Si calláis sois cómplices, si compráis les entregáis un arma, si especuláis SOIS ASESINOS.</strong>

Espero tener preparada la quinta parte pronto. Será a modo de conclusiones y proponiendo una nueva forma de vida, una revolución cívica para parar los píes a este cruel sistema.

Saludos.

Patronio.

FUENTE: http://atlante-nachel-iii.blog.com.es/2011/02/28/ecologia-del-terror-4-los-alimentos-10719189/

BLOG DEL AUTOR PATRONIO: http://patronio.blog.com.es/